¿Qué significa Génesis 41:19?
Este capítulo comenzó con una descripción de dos sueños perturbadores que el faraón, el gobernante de Egipto, había tenido (Génesis 41:1–7). Después de que sus consejeros no pudieran interpretarlos, el faraón se enteró de la capacidad que José tenía para interpretar sueños (Génesis 41:8–13). El faraón mandó a llamar a José rápidamente y le pidió que interpretara sus sueños (Génesis 41:14–18). La descripción que aparece es muy similar a la que ya se nos dio durante el primer capítulo. El faraón vio siete vacas sanas y gordas que salían del río para alimentarse a lo largo de la orilla.Ahora, el faraón describe haber visto a siete vacas más emerger del Nilo. Estas vacas, sin embargo, eran más feas y flacas, y estaban desnutridas. El faraón dice que nunca había visto algo así antes. De hecho, el faraón repite la palabra raíz que se usa para "fealdad", la cual también puede referirse a los conceptos de maldad o atrocidad. Esto hace que esta descripción cambie un poco con respecto a la descripción del sueño que apareció al principio del capítulo.
El faraón continuará explicando la manera en que las vacas sanas acabaron siendo devoradas por las enfermas (Génesis 41:20–21).
Génesis 41:9–36 contiene la explicación de José sobre las visiones que tuvo el faraón. El gobernante de Egipto se sentía agitado por lo sueños que había tenido y, su copero, quien anteriormente estaba en la cárcel, recordó a un joven hebreo que estaba con él en la cárcel. Este era José, quien le había explicado su sueño al copero mientras estaban en la cárcel (Génesis 40:23). José explica que los sueños de Faraón significan que habría siete años de abundancia y siete años de hambruna. José, entonces, propone audazmente un plan para manejar la crisis que se estaba avecinando.
En Génesis 41, José comienza siendo un esclavo hebreo olvidado en prisión y termina siendo el segundo hombre más poderoso de Egipto. El copero del capítulo anterior finalmente menciona a José dos años más tarde, cuando el faraón estaba preocupado por unos sueños que tuvo que los "sabios" de Egipto no pudieron interpretarle. José le reveló el significado de los sueños al faraón: siete años de abundancia serían seguidos por siete años de una gran hambruna. El faraón, reconociendo que el Espíritu de Dios estaba con José, lo convirtió en el segundo al mando de toda la nación y le encargó el trabajo de preparar al país para afrontar la hambruna.