¿Qué significa Génesis 45:4?

José finalmente les ha revelado su identidad (Génesis 42:7–8) a sus 11 hermanos (Génesis 45:1–3). Diez de esos hermanos participaron en la venta de José como esclavo hacía ya más de veinte años (Génesis 37:24–28). En realidad, no sabían que José se iba a convertir en el segundo hombre más poderoso de Egipto (Génesis 41:40). Cuando se identificó por primera vez, su reacción inicial fue tener tanto conmoción como miedo.

Su conmoción provenía de la inesperada reaparición de su hermano desde la nada. La última vez que hablaron con José, él era un pastor hebreo de diecisiete años (Génesis 37:1–2), y estaba rogándoles por su vida (Génesis 42:21). Ahora tenía casi 40 años (Génesis 41:46–48), estaba vestido como un noble egipcio (Génesis 41:42), hablaba el idioma egipcio (Génesis 42:23) y tenía un inmenso poder (Génesis 41:44). Los hermanos creían que José iba a vengarse de ellos. Los diez hermanos mayores sabían que eran culpables de haber cometido un pecado atroz al haber tratado a José como lo habían hecho (Génesis 42:21–23; 44:16). La víctima de su maldad ahora tenía un poder ilimitado sobre ellos. Por lo tanto, todo esto sería casi imposible de creer para estos hermanos.

José quería convencerlos, y les pidió que se acercaran y lo miraran más de cerca. También les aclaró que él era el hermano al que vendieron como esclavo. Seguramente, mientras más se iban dando cuenta de que este era José en realidad, más miedo comenzaron a sentir. A medida que continuaba la reunión, José continuó intentando tranquilizar a sus hermanos (Génesis 45:5–8).