¿Qué significa Génesis 26:4?

En el versículo anterior, Dios se le apareció a Isaac con un mensaje poderoso: Yo también voy a establecer el juramento que le hice a Abrahán a través de ti. Estaré contigo. Yo te bendeciré. El Señor quería que Isaac entendiera que todas las promesas en las que su padre confiaba eran también para él (Génesis 12:1–3).

Ahora el Señor va incluso más allá y le repite a Isaac esas promesas: la descendencia de Isaac sería tan numerosa como las estrellas del cielo. Su descendencia poseería toda la tierra de Canaán. A través de la descendencia de Isaac, todas las naciones de la tierra serían bendecidas. Ahora sabemos que la bendición global última finalmente se obtendría a través de la vida, muerte y resurrección del descendiente de Isaac, Jesucristo (Mateo 1:1–16; Lucas 3:23–28).

Por supuesto, es lógico que todas esas cosas sucedieran a través de Isaac para que las promesas que Dios le hizo a Abrahán se cumplieran. Sin embargo, el Señor tenía la intención de que Isaac comprendiera que estas promesas también eran para él. Dios quería que Isaac se las tomara personalmente y no simplemente se viera a sí mismo como una extensión de Abrahán. El Señor estaría con Isaac.