¿Qué significa Mateo 5:27?
Jesús está dando ejemplos para respaldar lo que ya dijo durante el versículo 20 de que nadie puede entrar en el reino de los cielos a menos que su justicia excediera la de los escribas y los fariseos. En parte, esto nos sugiere que esos grupos eran en realidad hipócritas. El objetivo más inmediato de todo esto era enfatizar el nivel de perfección que se exige para poder formar parte del reino de Dios. El primer ejemplo que Cristo compartió al respecto fue que, tanto la ira que pudiéramos albergar en nuestros corazones como el asesinato, deben entenderse como pecados, y los dos nos pueden conducir hacia el fuego del infierno (Mateo 5:21–22).Ahora Jesús dice que sus oyentes ya habían escuchado la frase: "no cometerás adulterio". Este es el séptimo de los Diez Mandamientos (Éxodo 20:14). Los líderes religiosos les recordaban esto a todos los judíos continuamente. Cuando Jesús usa la frase "han oído", esto no quiere decir que esta frase no fuera verdad. Más bien, lo que Jesús hace es completar el significado de la frase en sí. Jesús no contradice la ley contra el adulterio, sino que profundiza en su verdadero significado.
Tal y como lo había hecho antes, Jesús dice que evitar el pecado físico no es "suficientemente". De hecho, debemos saber que nuestro corazón es lo que dirige nuestras acciones, por lo que honrar este mandamiento se refiere a algo más profundo que el mero hecho de no tener relaciones sexuales extramaritales; lo que Dios quiere es que las personas controlen lo que sucede en sus corazones mucho antes de que se les presente la oportunidad de cometer cualquier tipo de adulterio físico.
Mateo 5:27–30 continúa ampliando un tema que Jesús ya introdujo en Mateo 5:20. La verdadera "justicia" no se trata simplemente de lo que una persona hace, sino que tambiÉn incluye lo que piensa y siente. Esta enseñanza pretende explicarnos la realidad del pecado y resaltar la necesidad de la gracia y la fe, no las buenas obras, para alcanzar la salvación. En este pasaje, Jesús reconoce que el adulterio es un pecado, pero tambiÉn declara que las actitudes de lujuria tambiÉn son pecaminosas. En realidad, Jesús no dice que la lujuria sea lo mismo que el adulterio, lo que enseña es que la lujuria es absolutamente un pecado, incluso si no acabara convirtiÉndose en una acción física.
El Sermón del Monte contiene algunas de las enseñanzas más desafiantes de Jesús. Este sermón comienza con las bendiciones que se le ofrecen a un grupo de personas muy específico, las Bienaventuranzas. Los discípulos de Jesús deben hacer buenas obras para convertirse en una influencia poderosa en el mundo: como la sal de la tierra y la luz del mundo. La justicia superficial de los fariseos no es lo suficientemente buena como para alcanzar el cielo. Los pecados del corazón, como los insultos con ira y la lujuria intencional, son dignos del infierno tanto como el adulterio y el asesinato. El divorcio fácil y los juramentos engañosos están prohibidos. Los creyentes no deben buscar vengarse de los demás. En cambio, Dios quiere que amemos a nuestros enemigos y oremos por aquellos que nos persiguen. En resumen, debemos esforzarnos por ser perfectos, tal y como Dios es perfecto.