¿Qué significa Génesis 46:4?

Dios le está hablando a Jacob durante una visión nocturna en Berseba (Génesis 46:1–3). Berseba está en el extremo sur de la tierra que el Señor le había prometido a Jacob, a su abuelo Abrahán y a su padre Isaac (Génesis 13:14–16). Dios le aseguró a Jacob que no tuviera miedo de dejar atrás la Tierra Prometida y establecerse en Egipto. La promesa aún se mantendría. De hecho, Dios dijo que haría del pueblo de Jacob una gran nación en la tierra de Egipto (Éxodo 1:7).

Dios quería que Jacob supiera que Su capacidad para cumplir Sus promesas no estaba restringida por ninguna frontera, y Dios cumpliría todo lo que le había prometido que iba a hacer. Ahora Dios insiste en que estaría con Jacob en Egipto. Esto es como la promesa que Dios le hizo a Jacob cuando dejó Canaán la primera vez que huyó de Esaú: "Date cuenta de que yo estoy contigo. Yo te protegeré por dondequiera que vayas, y volveré a traerte a esta tierra. No te dejaré ni un momento, hasta que haya hecho lo que te he dicho" (Génesis 28:15).

Dios nuevamente le promete a Jacob que lo traerá de regreso a la Tierra Prometida. Dios usa un lenguaje enfático, esto quiere decir que lo que estaba diciendo se cumpliría sí o sí. Jacob pronto fallecería y sería enterrado por José en la tumba familiar en Canaán (Génesis 50). Lo que Dios quiere decir es que Israel, la nación que vendría de Jacob, regresaría un día a la Tierra Prometida. Dios también incluye la promesa de que el amado hijo de Jacob, José, quien Jacob había dado por muerto, sería el que le cerraría los ojos después de que muriera.

Esta es la revelación final que Dios le hizo los patriarcas: Abrahán, Isaac y Jacob. Dios acabará cumpliendo todas Sus promesas, pero no volvería a aparecer hasta siglos después, cuando le hable a Moisés desde la zarza ardiente (Éxodo 3).