¿Qué significa Génesis 29:22?

Labán parece estar cumpliendo su parte del acuerdo con Jacob: le iba ofrecer la mano de su hija, Raquel, a cambio de los siete años de trabajo gratuito que Jacob le había ofrecido (Génesis 29:18–19). Jacob le dedicó siete años de trabajo a Labán y ahora le exigió casarse con Raquel (Génesis 29:21). Jacob no había tenido ningún tipo de intimidad con Raquel (Génesis 29:21) y estaba listo para casarse con ella. Apropiadamente, Labán organizó un banquete de bodas, invitando a todos en el área para que asistieran a la celebración.

En realidad, no se nos dice si alguien de la familia de Jacob fue a la boda, ni tampoco se nos dice que Jacob estuviera en contacto con Isaac, Rebeca, Esaú u otras personas de su casa durante los siete años que habían pasado. Eso no debería sorprendernos dadas las circunstancias en las que Jacob se había ido de su casa (Génesis 27:33–41). Aun así, nos preguntamos si les habría llegado alguna noticia de la boda de Jacob.

Una fiesta de bodas durante esta época podía durar hasta una semana, y había mucha comida y bebida, así como varios rituales y ceremonias específicas. Uno de los eventos importantes implicaba que el novio se llevara a la novia a su habitación para consumar el matrimonio. Ese fue el momento en el que Labán traicionará tanto su contrato como la relación que tenía con Jacob de la manera más impactante posible.