¿Qué significa Génesis 19:33?

Las dos hijas vírgenes de Lot lo habían perdido todo, y habían sido testigos de la aniquilación de su cultura en Sodoma, la pérdida de sus futuros esposos, la destrucción de la riqueza y el poder de su familia y la muerte de su madre. Su desesperación ya se nos expresó durante los versículos anteriores: estaban convencidas de que ningún hombre se casaría con ellas y nunca tendrían hijos. Todo lo que tenían se había desvanecido por completo. Ahora, estaban viviendo en las colinas dentro de una cueva sin esperanza alguna.

Esta falta de confianza en Dios se refleja pobremente en el liderazgo espiritual de Lot. De nuevo, Lot decidió, no solo criar a sus hijas en una ciudad tan corrupta como Sodoma, sino que quiso que sus hijas se casaran con hombres de esa misma ciudad. En realidad, no nos sorprende que estas mujeres se desesperaran ante una crisis de esas características. Desafortunadamente, su educación también pareció influir en la manera en la que intentaron resolver la situación en la que se encontraban. En Sodoma, los hombres de la ciudad exigieron que Lot sacara a sus invitados para que pudieran violarlos (Génesis 19:5). Aquí, las hijas de Lot hacen aquí un plan que también involucraba un tipo de abuso sexual.

Las hijas de Lot querían emborrachar a su padre para poder acostarse con él, con el fin de que pudieran concebir hijos. Aquí, la hija primogénita de Lot ejecuta con éxito su parte del plan. De este modo, se encargaron de que Lot estuviera tan borracho que no tuviera ni idea de lo que estaba sucediendo. Su hija mayor se aprovechó sexualmente de su padre para así poder concebir un hijo.