¿Qué significa Génesis 15:5?

La palabra del Señor le vino a Abrán en una visión, asegurándole a Abrán que recibiría tanto la protección como una recompensa de Dios. Abrán respondió con sinceras preocupaciones, señalando que Dios, el Hacedor de Promesas todavía no le había dado ningún hijo. Dios le aseguró a Abrán una vez más que su heredero vendría de su propia carne y sangre, y no sería un siervo. La expresión hebrea que se usa en el versículo anterior se refería explícitamente a un hijo biológico, un "hijo" literal y natural para Abrán.

Ahora Dios de alguna manera le muestra a Abrán las estrellas. Dado que este encuentro se describe como una visión, es difícil saber si esto fue una ilusión o un viaje real al exterior. Los versículos posteriores nos sugieren que esta parte de la historia ocurre antes de la puesta del sol (Génesis 15:12). En cualquier caso, Dios le ordena a Abrán que mire hacia arriba y cuente las estrellas, si es que puede hacerlo. Por supuesto, Abrán no podía contar las estrellas. Tampoco podía contar el polvo de la tierra, al que Dios se había referido al hacer una promesa similar en Génesis 13:16.

Dios le asegura a Abrán una vez más que su descendencia sería tan numerosa que no se podría contar.