¿Qué significa Mateo 17:13?
¿Regresaría Elías el profeta antes de la venida del Mesías? Malaquías 4:5–6 dice que así iba a suceder. Pedro, Jacobo y Juan acababan de ver a Elías en la montaña hablando con Jesús. Si Elías aún no había regresado a la Tierra para llevar al pueblo hacia el arrepentimiento, ¿cómo podía Jesús ser el Mesías?Jesús les ha dicho que el "Elías" profetizado en el Antiguo Testamento había regresado, pero no fue reconocido por los líderes religiosos de Israel. Jesús dijo esto en Mateo 11:14. Ahora los discípulos se dieron cuenta de que Jesús estaba diciendo que Juan el Bautista fue quien había cumplido la profecía del regreso de Elías.
Jesús no estaba intentando ofrecer excusas acerca de esta profecía. La intención de Dios siempre fue que Juan el Bautista cumpliera esa profecía. Antes de que naciera Juan, un ángel le dijo a Zacarías, el padre de Juan, que Juan "hará que muchos de los hijos de Israel se vuelvan al Señor su Dios, y lo precederá con el espíritu y el poder de Elías, para hacer que los padres se reconcilien con sus hijos, y para llevar a los desobedientes a obtener la sabiduría de los justos. Así preparará bien al pueblo para recibir al Señor" (Lc 1:16–17).
De alguna manera, Juan el Bautista operó en el espíritu y el poder de Elías. Es probable que algunos esperaran que el mismo Elías resucitara y volviera a ministrar en Israel; pero Juan rechazó esa idea (Juan 1:20–21). El plan de Dios era que Juan el Bautista realizara la obra de Elías en el espíritu y el poder de Elías, para así cumplir el plan de Dios que tenía el objetivo de preparar al pueblo para la venida de Jesús el Mesías (Mateo 11:14).
Mateo 17:1–13 representa el cumplimiento de la predicción que hizo Jesús en el capítulo anterior acerca de que algunos de los discípulos no morirían antes de verlo venir en Su reino (Mateo 16:28). Pedro, Jacobo y Juan vieron a Jesús transfigurado, irradiando la gloria de Dios, mientras hablaba con Moisés y Elías. Pedro cometió un error en su intento de contribuir al momento. La voz de Dios Padre identificó a Jesús como su Hijo y les ordenó a los discípulos que lo escucharan. Jesús les dijo a los tres que no le dijeran a nadie más nada de lo que habían visto hasta que él resucitara de entre los muertos. Al final, Jesús responde a una pregunta sobre una profecía que involucra a Elías.
Jesús se llevó a Pedro, Jacobo y a Juan hacia un monte alto. Allí, lo vieron "transfigurado" en Su forma divina y resplandeciente. También vieron a Cristo hablando con Moisés y Elías, pero Jesús les dice que no digan nada de esto hasta después de Su resurrección. Jesús sana a un niño que estaba siendo atormentado por un demonio después de que los discípulos no pudieron expulsarlo ellos mismos. Jesús les dice muy claramente a los discípulos que sería entregado en manos de hombres que finalmente lo matarían, pero que resucitaría al tercer día. Después de explicar la razón por la que él no debía pagar el impuesto del Templo, Jesús accede a pagarlo y le dice a Pedro que vaya a buscar el dinero dentro de la boca de un pez.
