¿Qué significa Marcos 15:27?

"Ladrón" proviene de la raíz griega lestes, que se refiere a un saqueador o un bandido. Es la misma palabra que usa Juan para describir a Barrabás (Juan 18:40), aunque a Barrabás también se le describe como un insurrecto y asesino (Marcos 15:7). Normalmente, el castigo por robo es reembolsar a la víctima con el valor del artículo robado multiplicando su valor unas cuantas veces. La crucifixión solo se aplica si el robo ocurre en un edificio religioso o de la realeza o si el ladrón mata a alguien durante la ejecución del robo. Los académicos postulan que estos hombres son insurrectos, posiblemente incluso cómplices de Barrabás, aunque no tenemos pruebas contundentes para demostrar esto.

Esta escena nos recuerda a un evento anterior (Marcos 10:35–45). En el camino a Jerusalén, antes de que Jesús y los Doce llegaran a Jericó, Jacobo y Juan (y su madre; Mateo 20:20) le preguntaron a Jesús si los dos hermanos podían sentarse a la derecha y a la izquierda de Jesús cuando él estableciera Su reino. Los discípulos todavía pensaban que este viaje a Jerusalén podría ser el comienzo de una revuelta de Jesús contra los romanos y los primeros pasos para liberar a los judíos. Tomás, por su parte, pensó que era muy probable que todos murieran (Juan 11:16).

Jesús les preguntó a los dos discípulos si podían compartir Su destino y luego admitió que de hecho lo harían. Sin embargo, no se refería a la gloria o la autoridad, sino que se refería al rechazo de los judíos y la muerte en defensa del reino de Dios. Jesús luego explicó, nuevamente, que el liderazgo en Su reino conlleva el humillarse uno mismo y servir a los demás, incluso hasta el punto de la muerte. Jesús también les dijo a Jacobo y Juan que no tenía la autoridad para decir quién estaría a su izquierda y a su derecha.

Aquí, en la cruz, Jesús encarna la plena expresión del servicio sacrificial y la manifestación del reino de Dios. Jacobo y Juan deberían estar agradecidos de que dos ladrones hayan ocupado los lugares que pidieron: al lado de Jesús. Los asientos a la izquierda y derecha de la regla son típicamente para asesores. Jacobo y Juan no pueden aconsejar a Jesús más que estos ladrones. Uno de los ladrones se da cuenta de esto (Lucas 23:39–43); y confiesa que se siente indefenso y que solo Jesús puede salvarlo. En realidad, no tiene derecho a aconsejar o juzgar a Jesús. En respuesta, Jesús no le ofrece una posición de autoridad, sino que le promete la salvación.

Jacobo y Juan finalmente comparten aspectos del destino de Jesús. Jacobo es el primero de los Doce en ser martirizado, y será decapitado por orden de Herodes Agripa (Hechos 12:1–2). Juan sufrirá mucho antes de morir de viejo. La madre de Juan está viendo morir a Jesús. Ella se llama Salomé, quien está alejada de la cruz junto con la madre de Jesús y María