¿Qué significa Hebreos 9:23?

Anteriormente, el escritor de Hebreos explicó cómo los componentes del antiguo pacto estaban destinados a simbolizar las verdades que se encuentran en el nuevo pacto. Al mismo tiempo, esos sacrificios y rituales tenían inconvenientes que, en sí mismos, estaban destinados a ofrecernos una mejor resolución de nuestro pecado en el futuro. Dado que Dios nos prometió un nuevo pacto, es lógico que el nuevo pacto sea superior al antiguo. La clave de ese simbolismo y esa comparación radica en el derramamiento de sangre. Tal y como nos indicaron algunos de los versículos anteriores, la sangre es necesaria para el perdón de los pecados. Sin embargo, el sacrificio de animales sólo puede llegar hasta cierto punto a la hora de expiarnos del pecado humano. El sacrificio de Cristo puede salvarnos completamente, ya que tiene un poder que la sangre animal no tiene.

Cuando este versículo se refiere a las "réplicas" de las cosas celestiales, esta es otra expresión que hace referencia a cómo los componentes físicos del antiguo pacto eran un símbolo del ministerio de Jesucristo. En resumen, ambos pactos se establecieron mediante el derramamiento de sangre, pero el sacrificio del nuevo pacto nos ofrecía un sacrificio superior (Hebreos 9:9–14) y se nos ofrece en un lugar superior (Hebreos 8:2).