¿Qué significa 1 Pedro 1:2?

La palabra "elegidos" aparece en el versículo 1 en muchas traducciones, pero Pedro describe lo que significa en el versículo dos. ¿Qué significa ser uno de los "elegidos", uno de los elegidos de Dios? ¿De qué manera son los "elegidos" las personas que creen en Cristo?

Primero, somos elegidos según la presciencia de Dios Padre. Eso significa que Dios ya nos conocía antes de que ocurriera algo. ¿Antes de qué? Efesios 1:4 dice que Dios nos eligió en Cristo incluso "antes de la fundación del mundo". 1 Pedro 1:20 dice que Cristo "ya había sido destinado desde antes de que Dios creara el mundo" por voluntad del Dios. Dios no solo sabía de nuestra existencia, sino que nos conocía personalmente, de alguna manera, y nos eligió. Más aún, Dios nos elije mediante la obra santificadora del Espíritu. Eso significa que el Espíritu Santo de Dios está involucrado en la decisión de "apartarnos" para servirle a Dios, para que Dios nos puede llamar "santos".

Finalmente, Dios nos elije para hacer algo: para obedecer a Jesús y ser "limpiados con su sangre". Por muy extraño que esto nos pudiera parecer, la audiencia judía de Pedro lo habría entendido de inmediato. Según la ley del Antiguo Testamento, la sangre de un animal sacrificado era necesaria para el perdón del pecado y para mostrar todo lo que le pertenecía a Dios. Por supuesto, en realidad no hemos sido literalmente rociados con la sangre física de Jesús. Sin embargo, Su sangre se derramó literalmente cuando murió en la cruz para pagar por nuestros pecados. Ese derramamiento de sangre hizo posible que nuestros pecados se limpiaran, que Dios nos apartara y nos llamara "santos". Entonces, cuando obedecemos a Cristo, estamos cumpliendo con el propósito por el que fuimos creados. Esa es la razón por la que fuimos elegidos.

Pedro termina el versículo compartiendo un saludo y una oración para que la gracia y la paz de Dios se multiplicaran para todas aquellas personas que leyeran la carta.