¿Qué significa 1 Pedro capitulo 5?
Pedro termina la carta que les escribió a los cristianos que estaban dispersos en Asia Menor compartiendo algunas instrucciones finales. Primero, les ofrece a los ancianos una serie de consejos sobre la manera en que deberían liderar a la iglesia, incluye el cómo y el por qué debemos vivir en humildad los unos con los otros, y les hace una advertencia final para que tengan la mente clara y estén alerta.Pedro se consideraba uno de esos ancianos; por lo tanto, Pedro está compartiendo las mismas instrucciones que Jesús compartió con él: debemos alimentar y cuidar de las ovejas de Cristo. Ese es el papel de un anciano en la iglesia local: servir como pastor del "rebaño de Dios". Pedro insiste en que quienes aceptan ese trabajo lo hacen porque quieren y no solo por dinero o poder. Ante todo, deben predicar con el ejemplo, mostrándoles a los demás en la iglesia cómo seguir a Cristo mientras lo hacen ellos mismos. Cuando Cristo regrese, recompensará a esos pastores con una corona de gloria inmarcesible.
De la misma manera, los más jóvenes deben obedecer a esos ancianos. Los nuevos creyentes deberían ver a los cristianos más experimentados como personas a las que deben obedecer, principalmente porque esa es la voluntad de Dios. Los ancianos, a su vez, deben vivir de tal manera que los más jóvenes puedan ver un ejemplo de conducta en ellos.
Luego Pedro se dirige a todos los cristianos diciéndoles que se vistan de humildad, que sean humildes los unos con los otros mientras nos sometemos a Dios. Dios es Dios, lo cual quiere decir que nosotros no lo somos. Debemos someternos a Dios, entendiendo que Dios es el que les da sentido a nuestras vidas. En lugar de tratar de exaltarnos continuamente, debemos olvidarnos de eso mientras lo obedecemos, porque Dios será quien nos exaltará cuando llegue el momento adecuado. Una de las cosas que debemos hacer es entregarle todas nuestras preocupaciones al Padre, porque Él cuida de nosotros. Por lo tanto, al tratar de llevar las cargas de esta vida sin Su ayuda, también estaríamos demostrando que todavía hay algo de orgullo en nuestros corazones.
Luego, Pedro les dice a sus lectores por tercera vez que tengan la mente clara (o sobria) y estén en alerta. La razón por la que debemos hacer esto es debido a que tenemos un enemigo mortal merodeando y buscando devorarnos. Pedro dice que el diablo es como un león y por eso debemos resistirnos ante sus ataques. Para ello, debemos mantenernos firmes en nuestra fe, tanto en Cristo como en el plan que Dios tiene para nosotros. Ese plan puede incluir sufrimientos durante el breve transcurso de esta vida y, sin embargo, también sabemos que un día dejaremos de sufrir para siempre y pasaremos la eternidad con nuestro Padre, quien es siempre poderoso, y Dios nos restaurará, confirmará, fortalecerá y establecerá para siempre.
Finalmente, Pedro cierra su carta elogiando a Silas (o Silvano), quien probablemente fue la persona que les entregó esta carta a las iglesias de Asia Menor, y también les manda saludos de los cristianos donde estaba, incluido uno de su hijo en la fe, Marcos.