¿Qué significa Santiago 1:26?
Durante los versículos anteriores, Santiago enfatizó que las personas que confían en Dios en realidad hacen lo que Su Palabra dice que deben hacer. Específicamente, analizan la ley perfecta que nos otorga libertad y actúan en consecuencia. Ahora, en el versículo 26, Santiago especifica cómo debemos obedecer esta ley que nos da libertad. Santiago dice que deberíamos revelar el carácter de nuestra religión en tres áreas específicas.En primer lugar, nadie debería considerarse una persona religiosa si no saber refrenar su lengua. Es decir, si no podemos controlar las palabras que salen de nuestra boca nos estamos mintiendo a nosotros mismos cuando decimos que somos personas religiosas, algo que Santiago ya ha dicho en relación con la ira (Santiago 1:19–20), en el sentido de que el autocontrol es clave para la vida cristiana (2 Pedro 1:5–6; Gálatas 5:22–23).
Entonces, ¿es una meta digna para los cristianos ser "religiosos"? La mayoría de los cristianos evitan usar esa palabra. En la actualidad, la palabra "religión" tiende a asociarse con el cumplimiento de una serie de rituales o reglas que nos dan la esperanza de ganarnos algún favor divino. Sin embargo, las personas que ya han alcanzado la salvación a través de la fe en Cristo ya han recibido el favor de Dios. Gracias al Espíritu y Su poder, vivimos tal y como lo hizo Jesús, tomando buenas decisiones en respuesta a la gracia que Él ya nos ha ofrecido. En otras palabras, los cristianos tienden a rechazar el significado moderno del término "religión", pero al mismo tiempo sí aceptan la "religión" en el sentido al que se refiere Santiago en este versículo.
Cabe señalar también que más adelante en esta carta, Santiago dirá que no hay ningún ser humano que sea capaz de controlar perfectamente la lengua (Santiago 3:7). Por tanto, si no es posible alcanzar ese estándar, ¿quiere decir Santiago que pasaremos nuestras vidas buscando un estándar de perfección religiosa que es imposible de alcanzar? Pronto nos quedará claro que esto no es así. En cambio, Santiago nos animará a seguir actuando como si creyéramos en Dios, para demostrar con nuestras decisiones que confiamos en nuestro Padre.
Aun así, tal y como lo veremos en el siguiente versículo, la "religión" puede ser algo bueno ante Dios si se centra en lo que es correcto y aceptable a ojos de Dios.