¿Qué significa Hebreos 10:36?

Los versículos 35 y 36 son un breve resumen de todo el libro de Hebreos. La audiencia original de la carta es la población de cristianos judíos que estaban siendo perseguidos durante la era de la iglesia primitiva. Los primeros capítulos detallan cómo la humanidad de Jesús lo convirtió en el candidato perfecto para ser nuestro Mesías (Hebreos 1—2). El escritor luego señaló el sufrimiento de Israel como un ejemplo de cómo Dios respondería a la duda y la desobediencia: con sufrimiento y castigo, con el objetivo de corregir nuestras actitudes pecaminosas (Hebreos 3–6). Después de esto, Hebreos pasó un tiempo considerable explicando cómo el nuevo pacto en Cristo es superior al antiguo pacto de sacrificios de animales (Hebreos 7–10).

Entonces, sabiendo todo esto, los cristianos debemos tener mucha confianza en nuestra fe. Este motivo de confianza debe darnos ánimo y valentía, incluso frente a la persecución. Al mismo tiempo, la profunda seguridad que Dios nos ofrece no deja excusa alguna cuando elegimos pecar (Hebreos 10:26–29). Para obtener todas las bendiciones que Dios quiere para nosotros, espiritualmente, debemos estar dispuestos a hacer Su voluntad.