¿Qué significa Romanos 11:32?
Este versículo es una declaración profunda sobre la verdad, pero debe entenderse en el contexto específico de este pasaje. Pablo no noes está enseñando que todas las personas del mundo, desde el principio de los tiempos hasta ahora, recibirán la misericordia de Dios. Esta idea, conocida como universalismo, contradiría lo que Pablo escribió anteriormente: que la única forma de alcanzar la salvación es aceptar a Cristo (Romanos 10:9–10). Pablo ha dejado muy claro que la oportunidad de recibir la misericordia de Dios, en lugar del pago merecido por nuestros pecados (Romanos 6:23), es algo accesible solo a través de Jesucristo.En cambio, la palabra "todos" debe entenderse en referencia a los dos grupos de personas sobre los que Pablo ha estado hablando a lo largo de este capítulo: los judíos y los gentiles. Dios ha sujetado a ambos grupos, "todos", a la desobediencia por un tiempo para que personas de ambos grupos puedan recibir Su misericordia en el momento adecuado a través de la fe en Cristo.
¿Qué significa que Dios sujetó a cada grupo a la desobediencia? En Romanos 1, Pablo describe la reacción de Dios ante la incredulidad pecaminosa de los gentiles. Dios los entregó a sus propios deseos pecaminosos (Romanos 1:24, 26, 28). De manera similar, también se dice que Dios endureció el corazón de los israelitas por un tiempo, debido a su incredulidad inicial en cuanto a Cristo (Romanos 11:25).
Sin embargo, al final, Dios mostrará misericordia a las personas de ambos grupos, a "todos", a través de Su gracia y su fe en Cristo.
Romanos 11:25–32 concluye una sección larga sobre los planes que Dios ha preparado para Su pueblo israelita. En resumen, Dios planea eliminar el endurecimiento de la incredulidad de Israel y al mismo tiempo renovar Su pacto con ellos en el futuro. Esto ocurrirá cuando muchos judíos lleguen a la fe en Cristo en algún momento en el futuro. El pueblo de israel sigue siendo profundamente amado por Dios debido a las promesas que les hizo y la relación que tiene con los patriarcas. Al final, Dios les mostrará Su misericordia a todos los judíos y gentiles que se acerquen a Él a través de la fe en Cristo para conseguir el perdón de sus pecados.
En Romanos 11, Pablo concluye la exploración del plan que Dios ha preparado para Israel, su pueblo elegido. Es cierto que, como nación, Israel ha rechazado la fe en Cristo, pero una parte de los israelitas ha creído en Jesús. Dios ha endurecido a los demás en la incredulidad, pero traerá a Israel de regreso a la fe cuando suficientes gentiles lo hayan aceptado a través de Cristo. Entonces, muchos israelitas también confiarán en Cristo, y Dios renovará Su pacto con Su pueblo. Pablo concluye esta sección con un poderoso poema o himno que habla sobre la independencia de Dios, y sobre cómo Dios está más allá de todo conocimiento.