¿Qué significa Romanos 15:26?
Antes de que Pablo pueda ir a Roma tal y como deseaba hacerlo, primero debía viajar a Jerusalén para darles el dinero que había recaudado a los judíos cristianos pobres que vivían allí. Durante sus viajes, Pablo animó continuamente a los cristianos gentiles a que ayudaran a sus hermanos judíos en Jerusalén (1 Corintios 16:1–2; 2 Corintios 8:1–9).Ahora tiene ese dinero en la mano. Las iglesias de Macedonia y Acaya, dice Pablo, se han complacido en contribuir con lo que pudieron para ayudar a los santos pobres de Jerusalén. Como en todo el Nuevo Testamento, Pablo usa la palabra "santos" aquí para referirse a todos aquellos que creían en Jesús. Por lo tanto, este grupo no estaba formado de personas que habían sido bendecidas por Dios de una manera especial, sino que estaba formado por todos aquellos que habían aceptado a Cristo a través de la fe.
En el siguiente versículo, Pablo enfatiza el hecho de que estos cristianos gentiles se complacieron en dar para satisfacer las necesidades de sus hermanos y sus hermanas judíos, personas que de hecho ellos todavía no conocían; su ofrenda vino por su propia voluntad. Pablo podría haber presionado un poco para que lo hicieran, pero la donación no era en absoluto obligatoria.
Romanos 15:22–33 describe que Pablo tenía el plan de visitar a los cristianos en Roma mientras estuviera de camino para predicar el evangelio en España. Pablo ha anhelado verlos durante años. Antes de ir a Roma, debía entregar un regalo de ayuda financiera que los cristianos gentiles les ofrecieron a los creyentes judíos más pobres en Jerusalén, y les pide a sus lectores que oren por él acerca de esto. Pablo espera con ansias ser liberado de los líderes religiosos judíos no creyentes, quienes querían matarlo, para que los judíos cristianos recibieran el regalo que les estaba llevando.
Romanos 15 comienza con Pablo dándole ánimo a los cristianos que tienen una fe más fuerte, para que se concentren en agradar a otros cristianos antes de agradarse a ellos mismos primero, con el fin de que la iglesia pueda unificarse. Cristo vino a cumplir las promesas de Dios para Israel y para los gentiles. Pablo está satisfecho con la fe y la práctica de los cristianos romanos, y su trabajo de llevar el evangelio a las regiones gentiles a las que todavía no había visitado se había terminado; por lo tanto, anhela ir a verlos. No obstante, primero debe llevar una ayuda económica a Jerusalén, un viaje por el que les pide que oren junto a él.