¿Qué significa Filipenses 1:2?

Este es el saludo típico que Pablo comparte en casi todas sus cartas, el cual se compone de cuatro partes. La primera mitad del saludo se centra en la gracia y la paz. La gracia es la base de la salvación y la norma de la vida cristiana. La paz forma parte del fruto del Espíritu (Gálatas 5:22–23) y es un rasgo que se menciona con frecuencia como una parte importante de la vida cristiana.

La segunda mitad del saludo típico de Pablo se centra en Dios, nuestro Padre, y en el Señor Jesucristo. Tanto la gracia como la paz proceden del Padre y del Hijo, quienes de acuerdo con este versículo y otras partes del Nuevo Testamento son iguales, lo cual enfatiza la naturaleza divina de Cristo como parte de la Trinidad. En otros lugares, las Escrituras también recalcan que el Espíritu Santo es la tercera Persona del Dios triuno (Mateo 28:18–20).

Pablo utiliza este saludo distintivo en casi todas sus cartas. La misma frase, en el mismo orden, también se puede ver en Gálatas 1:3, Efesios 1:2, 1 Corintios 1:3, 2 Corintios 1:2 y Romanos 1:7.