¿Qué significa Hebreos 7:20?
Este pasaje compara el sacerdocio del Antiguo Testamento con el de Jesucristo, a quien se describe como un sacerdote del orden de Melquisedec (Hebreos 5:5–6). La conclusión es que Jesús ofrece un sacerdocio mayor y una salvación más completa debido a la superioridad de su oficio. Estos versículos explican áreas específicas donde el sacerdocio del Antiguo Testamento es limitado y defectuoso. Como tal, en última instancia es inútil para nuestra salvación final (Hebreos 7:18). Cristo, por otro lado, es el Prometido sobre quien la ley debía enseñarnos (Gálatas 3:19–4: 7).En este versículo, el autor de Hebreos señala que los sacerdotes levitas asumieron sus funciones por herencia: "sin juramento". Los sacerdotes eran sacerdotes porque pertenecían a la tribu de Leví (Números 3:5–10). Sin embargo, Dios le ha garantizado a Jesús Su sacerdocio eterno (Salmo 110:4). Esto se relaciona con las otras debilidades del sacerdocio, que se muestran en los siguientes versículos: a saber, que los sacerdotes solo pueden servir hasta que mueran (Hebreos 7:23) y ellos mismos son pecadores (Hebreos 7:27). Jesús, por otro lado, vive para siempre (Hebreos 7:16) y no tiene pecado (Hebreos 4:15; 7:27).
Hebreos 7:11–28 amplía los argumentos anteriores relacionados con el sacerdocio de Jesucristo. Aquí, el autor muestra cómo el sacerdocio de Jesús es superior al de la Ley del Antiguo Testamento. Éste usa la figura de Melquisedec como modelo. El sacerdocio de Cristo es impecable, perfecto, interminable y como tal lo ha decretado Dios. El sacerdocio levítico era temporal, defectuoso, imperfecto y no podía durar para siempre. Esta mejor promesa, en Cristo, está ligada a la confianza que tenemos en Él como creyentes.
Cuando Abrahán se reunió con Melquisedec en el Antiguo Testamento, lo honró con diezmos. Esto muestra que Abrahán reconoció la superioridad de Melquisedec. Dado que el Antiguo Pacto no era perfecto, el cual estaba basado en sacerdotes y sacrificios de carácter limitado, es inferior al sacerdocio de Melquisedec, el cual es interminable. Jesucristo cumple la promesa de Dios de establecer un sacerdote "eterno" de una manera que satisfaga perfectamente nuestras necesidades.