¿Qué significa 1 Pedro 5:9?
En el versículo anterior, Pedro animó a sus lectores cristianos a mantenerse atentos y en alerta porque nuestro enemigo nos está persiguiendo. Ese enemigo es el diablo—Satanás—y su objetivo es "devorar" a los cristianos. Su intención es causarnos un daño real y duradero y, especialmente, debilitar la manera en que confiamos en el Padre. Aquí, Pedro nos dice cómo responder a la realidad del diablo.Primero, podemos y debemos resistirnos antes los ataques de Satanás. Cuando llegue la batalla, debemos contraatacar. Quizás esta manera de expresarlo nos podría sorprender un poco después de que Pedro haya dicho repetidamente que los creyentes deben someterse a quienes tienen autoridad, tanto a los reyes como a los gobernadores que estaban persiguiéndolos. Pedro dijo que los esclavos deben someterse a los amos y las esposas a los esposos, y eso no quiere decir nada sobre el valor intrínseco de una persona, sino que debemos hacerlo debido a que voluntariamente nos sometemos a la voluntad de Dios. Sin embargo, cuando se trata del diablo, Pedro no dice que nos sometamos, sino todo lo contrario, que luchemos contra Él con todas nuestras fuerzas.
¿Cómo? Manteniéndonos firmes en nuestra fe. Desde la primera conversación que la serpiente tuvo con Eva hasta la manera en que Satanás tentó a Jesús en el desierto, el diablo siempre ha buscado socavar la manera en que confiamos en Dios. Su objetivo es debilitar nuestra dependencia del Padre, quien sabemos que nos ama y tiene la capacidad de satisfacer todas nuestras necesidades.
Satanás puede recurrir a la persecución para lograr sus objetivos. Pedro dice que, en el momento en que el escribió la carta, muchos cristianos ya estaban siendo perseguidos, tal y como ocurre en la actualidad. El diablo también puede atacar nuestra fe de otras maneras, pero la estrategia para contraatacar sigue siendo la misma: confiar más en Dios; aumentar nuestra confianza en Él. Por tanto, dígale "no" al diablo y "sí" al Padre.