¿Qué significa Filipenses 2:30?
Epafrodito estaba totalmente comprometido con Cristo. De hecho, muchos dicen servir a Cristo, pero pocos pueden decir que casi han perdido su vida por servir al Señor. Epafrodito tenía un tremendo nivel de compromiso con el Señor, y por eso debía ser honrado.Epafrodito también debía ser honrado porque arriesgó su vida para servir de una manera que otros no podían. Una iglesia entera no podía dejar su ciudad para visitar a Pablo en otra. Sin embargo, una sola persona sí podía hacerlo, y Epafrodito era esa persona. Epafrodito debía ser honrado por haber aceptado el reto de liderar y servir de esta manera tan única. Durante mucho tiempo se ha honrado a los mártires por su sacrificio, y con razón. Sin embargo, este versículo también nos deja claro que las personas que arriesgan sus vidas para servir a Cristo también deben ser reconocidos por sus esfuerzos. En realidad, todos los miembros de una congregación no pueden servir de la misma manera debido a que todos recibimos diferentes regalos del espíritu y, por eso, las personas que asumen las tareas más difíciles deben ser respetados por las personas que no pueden llevar a cabo ese tipo de tareas.
En Filipenses 2:19–30 Pablo comparte una serie de instrucciones con la iglesia filipense con respecto a dos hom-bres en particular: Timoteo y Epafrodito. Timoteo era un amigo de confianza de Pablo, que probablemente iba a visitar la iglesia de Filipos pronto. Epafrodito tenía, al parecer, amigos y contactos en esta iglesia, y fue la persona que le había llevado a Pablo las ayudas económicas que la iglesia de Filipos le había enviado. Tras recupe-rarse de una enfermedad que casi acabó con su vida, Epafrodito fue quien les entregó a los filipenses esta carta de Pablo y Timoteo.
Pablo dice que Jesucristo es alguien que está dispuesto a ser humilde y que siempre obedece a Dios Padre. Esa es la razón por la que Dios exaltará el nombre de Jesús sobre todos los demás. Algún día, de una manera u otra, todas las personas admitirán que Jesucristo es el Señor, y acabarán siguiéndolo. Pablo quiere que los creyentes filipenses vivan contentos y que estén unidos. Pablo les da instrucciones sobre dos personas. La primera era la persona que les iba a entregar esta carta, Epafrodito. El otro era Timoteo, el amigo de confianza de Pablo, quien tenía la esperanza de ir a visitarlos muy pronto.
