¿Qué significa Hebreos 3:2?

El pueblo judío venera a Moisés más que a nadie, ya que fue él quien sacó a su pueblo de Egipto y les trajo la ley de Dios. Este pasaje está destinado a mostrar cómo Jesucristo es superior a Moisés. Se comienza prestando atención al hecho de que, así como Moisés le era fiel a Dios, Jesús también le es fiel al Padre. Moisés le fue fiel a la casa de Dios, algo que hace referencia al tabernáculo, porque siguió las instrucciones exactas que Dios le dio. Sin embargo, como persona, Jesús es muy superior a Moisés.

Los versículos posteriores explicarán cómo Moisés desempeñó el papel de siervo fiel en la "casa de Dios". Esto es honorable y admirable, ¡pero Jesús desempeña el papel de "hijo" de la casa y el constructor de la casa! Moisés es un siervo creado; Jesús es el Creador y Maestro (Hebreos 3:3, 6).

Hay que tener en cuenta dos cosas. La primera es que, si debemos seguir el ejemplo de Moisés, debemos seguir aún más el ejemplo de Jesús. En segundo lugar, tal y como explicarán los versículos posteriores, la fidelidad es un requisito para la victoria. Aquellos que no puedan emular la fidelidad, es decir, obediencia, confianza y fe en Dios, perderán su herencia. Esto no resulta en condenación, pero sí en disciplina.