¿Qué significa 1 Pedro 4:9?

Pedro continúa hablando sobre la manera en que deben vivir los cristianos sabiendo que el fin del mundo está cerca. La historia avanza hacia su fin y Cristo puede regresar en cualquier momento para juzgar al mundo. Lo primero que Pedro dijo en este pasaje fue que tengamos nuestra mente centrada para que podamos orar. Luego nos dijo que nos esforzáramos por amarnos con sinceridad de la misma manera que un atleta se esfuerza para ganar una carrera.

En este versículo, Pedro anima a los cristianos a demostrar ese amor siendo hospitalarios con los demás cristianos, algo que debemos hacer sin quejarnos. En la actualidad, los cristianos tienden a pensar en la hospitalidad como la costumbre de invitar a cenar a otros cristianos o acoger a una familia misionera que está de visita en nuestra ciudad. Sin embargo, en los días de Pedro, la hospitalidad cristiana representaba una necesidad mucho mayor que tenía el potencial de convertirse también en una carga.

Por un lado, muchos cristianos se vieron obligados a huir debido a que estaban siendo perseguidos. A menudo, esto significaba que tenían que viajar sin parar durante días. Por tanto, estos refugiados dependían de sus hermanos y hermanas en Cristo para dormir y alimentarse mientras iban de un pueblo a otro buscando un nuevo lugar donde vivir.

Sin embargo, ese tipo de hospitalidad podía ser arriesgada. Por un lado, es posible que las personas que acogían a estas familias no tuvieran mucho que ofrecerles. Por otro lado, compartir su casa con extraños podría ser peligroso, ya que seguramente había personas que no eran quienes decían ser. De hecho, los creyentes pueden llegar a aprovecharse de la generosidad de sus hermanos cristianos más allá de lo razonable. Aun así, Pedro les recuerda a sus lectores (y a nosotros) que así es la manera en que la familia de Cristo debe amarse entre sí, ya que eso forma parte de nuestro propósito porque Dios nos ha apartado para cumplir Sus propósitos. Por tanto, deberíamos aprovechar la oportunidad de amarnos sacrificialmente de esta manera, en lugar de ser hospitalarios con los demás de mala gana.