¿Qué significa Hebreos 1:11?

Los versículos 10, 11 y 12 repiten un pasaje del Salmo 102:25–27. Estas palabras vienen de un salmo que alaba a Dios por ser inmutable y eterno. El salmista ve esto como una razón para confiar en Dios, incluso cuando parezca que los enemigos estén ganándonos la batalla. El escritor de Hebreos quiere conectar esta idea de permanencia con las ideas que ya se mencionaron en los versículos anteriores.

Esta parte de Hebreos está dedicada a enfatizar la idea de que Jesús no es igual a los ángeles. Por el contrario, Jesús está por encima y más allá de todos los ángeles y, de hecho, es idéntico a Dios. Versículos como Hebreos 1:7 describen a los ángeles como siervos, con características que Dios puede cambiar para que puedan cumplir Sus propios propósitos. Al Mesías, por otro lado, se le retrata como la máxima autoridad y como alguien que no se desvanece ni cambia (es decir, es de naturaleza inmutable).

Los próximos versículos continuarán delineando la distinción que existe entre los ángeles y el Mesías, Jesucristo.