¿Qué significa Efesios 6:18?

Después de describir las piezas de la armadura de Dios, Pablo menciona otra parte importante de la batalla espiritual que se está librando en nuestras vidas: la oración. Aunque no forma parte de la armadura espiritual, la oración es esencial para ganar las batallas espirituales que luchamos. ¿Por qué? Porque la oración nos conecta con el poder de Dios, el cual es necesario para derrotar a los enemigos espirituales. Los ejércitos que se comunican bien durante la batalla tienen más posibilidades de salir victoriosos. Esto es especialmente cierto cuando se trata de los soldados que se centran en escuchar y obedecer las instrucciones de su comandante.

A continuación, Pablo nos habla sobre algunas formas en la que se puede aplicar esta enseñanza. Primero, los creyentes deben orar "en el Espíritu". Nuestras oraciones no son meramente nuestros pensamientos, ni tampoco representan meramente nuestros deseos, sino que debemos orar mientras nos sometemos a Dios.

Luego, debemos "mantenernos atentos". Aunque no estemos orando todo el tiempo, es cierto que sí podemos orar en cualquier momento. Por lo tanto, la oración es una herramienta que podemos usar en todo momento (1 Tesalonicenses 5:17).

Tercero, la oración es algo que hay poner en práctica constantemente. Por tanto, no oramos una vez al día y luego dejamos de hacerlo, sino que debemos hablar con Dios con perseverancia y sobre todo lo que nos ocurre en la vida. A Dios le importa todo, sin importar lo grande o lo pequeño que sea desde nuestra perspectiva.

Por último, Pablo habla sobre la importancia de orar por las necesidades de los demás creyentes: alabamos a Dios en la oración, oramos por nuestras propias necesidades y también oramos por las necesidades de los demás. Cada una de estas áreas es importante y siempre debemos tenerlas en cuenta.