¿Qué significa 2 Pedro 2:8?
En el versículo anterior, Pedro dijo que Dios rescató a Lot, quien era un "hombre justo", de la destrucción de Sodoma. Pedro dijo en ese versículo que Lot estaba "abrumado" por la conducta depravada de sus vecinos. En este versículo, Pedro dice que Lot estaba siendo "atormentado" por todos los pecados que presenció y que escuchó que ocurrían a su alrededor. Este término griego es ebasanizen, que significa torturar, poner a prueba o causar dolor. Esta palabra se utiliza a veces para describir un barco que intenta navegar con el viento en contra.Además, según el versículo 7, Lot fue considerado un hombre "justo". Claramente, esto no se debió a que siempre tomara las decisiones correctas ni a sus propias capacidades. Lot era "justo" porque Dios mismo lo había justificado. Al ser uno de los sobrinos de Abraham y un creyente en el Señor, Dios lo justificó. La declaración de justicia de Dios es lo único que importa cuando se trata de nuestra salvación eterna, y no las decisiones personales que tomamos a lo largo de nuestras vidas. Dios justifica a los cristianos basándose en la vida y la muerte sin pecado de Cristo, quien murió por nuestros pecados.
Nos guste o no, las personas que le pertenecen a Dios nunca llegarán a ser perfectas en este lado de la eternidad. Sin embargo, sí que deberíamos sentirnos atormentados por los actos flagrantes y rebeldes de pecado que ocurren en el mundo que nos rodea. Lot se sintió "abrumado" y "atormentado" por esas acciones, ¡aunque claramente no lo suficiente como para abandonar la ciudad sin ser arrastrado por los ángeles!
Cualquier conversación sobre Sodoma y Gomorra debe basarse en el hecho de que los pecados que se habían vuelto cosas normales en esas ciudades fueron verdaderamente atroces. La homosexualidad era solo uno de los pecados más flagrantes dentro de todos los pecados que se cometían en esas ciudades. Los vecinos de Lot también violaban a las personas en grupo. De hecho, los hombres de Sodoma le exigieron a Lot que dejara salir a sus visitantes para que pudieran violarlos (Génesis 19:4–7), y se indignaron mucho cuando Lot se negó a hacerlo.
Lot no siempre tomó todas las decisiones correctas, pero sabía en su alma que las acciones violentas de sus vecinos siempre fueron malvadas, y su conciencia lo estaba atormentando. Entonces, es esencial que, en la actualidad, el pueblo de Dios, el cual sigue siendo imperfecto, pero es justo al mismo tiempo, siga siendo lo suficientemente sensible a la realidad del pecado como para ser "atormentado" por el impacto que éste tiene en la cultura que nos rodea.