¿Qué significa 2 Pedro 1:10?
En un pasaje anterior, Pedro les advirtió a los creyentes que vivir sin añadirle las cualidades cristianas que enumeró durante los versículos 5, 6 y 7 provoca que nos volvamos improductivos en nuestro conocimiento de Jesús. Esas personas viven como si fueran incrédulos que están espiritualmente ciegos, y se olvidan de que sus pecados han sido perdonados. Ahora, Pedro anima a sus lectores cristianos a que demuestren la realidad de su llamado y elección.Pedro no está diciendo que la salvación eterna se base en la manera en que nos comportamos. Al igual que el resto de los autores del Nuevo Testamento, Pedro lo ha dejado muy claro: el perdón de los pecados es un regalo que recibimos a través de la gracia de Dios. Por tanto, no podemos ganárnoslo ni podemos perderlo debido a nuestros pecados una vez que lo hemos obtenido, y no tenemos que alcanzar un cierto nivel de santidad para así mantener la realidad de nuestro destino eterno junto a Dios.
Lo que Pedro parece estar diciendo es mucho más práctico, y se relaciona con la manera en que vivimos y nos comportamos realmente. Pedro dice que los cristianos deben confirmar su salvación, tanto para sí mismos y como para los demás, adquiriendo y demostrando estas cualidades en Jesús. De nuevo, esto no debe verse como una manera de poner a prueba nuestra salvación, ni tampoco implica que la salvación se alcanza debido a que exhibimos estos rasgos.
Pedro dice que las personas a las que Dios ha llamado para que pongan su fe en Cristo pueden poseer y "abundar" en estas cualidades. Por lo tanto, quienes las exhiben tienen plena confianza en la relación que tienen con Cristo. Sin embargo, las personas que no lo hacen no tendrán ese tipo de confianza. Si vivimos como deben vivir los hijos de Dios, tropezaremos mucho menos. De nuevo, "caerse" no significa que perderemos la salvación, sino que hemos perdido el tiempo, que nos volvemos improductivos e ineficaces, casi ciegos, y acabamos volviéndonos esclavos del pecado que se supone que debíamos haber dejado atrás.
Pedro claramente está hablando de las personas que no quieren comprometerse a vivir como Cristo al mismo tiempo que reclaman su lugar en la familia de Dios. Esto es, en el mejor de los casos, algo muy improductivo y, en el peor de los casos, muy peligroso. En cambio, Pedro les dice a sus lectores que sean muy diligentes a la hora de demostrar estas cualidades para reforzar su confianza y evidencia de que están seguros en Cristo.