Verso
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13

1 Tesalonicenses 3:5

LBLA Por eso también yo, cuando ya no pude soportar más, envié para informarme de vuestra fe, por temor a que el tentador os hubiera tentado y que nuestro trabajo resultara en vano.
NBLA Por eso también yo, cuando ya no pude soportar más, envié a Timoteo para informarme (para saber) de su fe, por temor a que el tentador los hubiera tentado y que nuestro trabajo hubiera sido en vano.
NVI Por eso, cuando ya no pude soportarlo más, mandé a Timoteo a indagar acerca de su fe, no fuera que el tentador los hubiera inducido a hacer lo malo y que nuestro trabajo hubiera sido en vano.
RV1960 Por lo cual también yo, no pudiendo soportar más, envié para informarme de vuestra fe, no sea que os hubiese tentado el tentador, y que nuestro trabajo resultase en vano.
JBS Por lo cual, también yo, no esperando más, he enviado a reconocer vuestra fe, no sea que os haya tentado el Tentador, y que nuestro trabajo haya sido en vano.

¿Qué significa 1 Tesalonicenses 3:5?

Pablo envió a Timoteo hacia Tesalónica para ayudar a los cristianos de allí (1 Tesalonicenses 3:1–2), pero también para averiguar si la fe de los creyentes era lo suficientemente fuerte como para aguantar todas las dificultades por las que estaba pasando. Pablo nombra al Diablo, sabiendo que fue el Diablo quien tentó a Eva en el jardín del Edén y a numerosos creyentes a lo largo de los siglos. De hecho, incluso trató de tentar al mismo Señor Jesús (Mateo 4:1–11). Por supuesto, Jesús pudo resistirse a las tentaciones del Diablo y ahora mismo está disponible para ayudarles a los creyentes a enfrentarse al Diablo y a salir victoriosos (Hebreos 2:18).

A Pablo le preocupaba que la fe de los creyentes de Tesalónica pudiera flaquear y debilitarse debido a las tentaciones del Diablo, lo cual impediría su crecimiento espiritual. Si eso ocurriera, dejaría de producir el fruto del Espíritu, lo cual era algo importante para Pablo. Hebreos 4:14–16 anima a los creyentes a orar con confianza cuando nos sentimos débiles; debemos darnos cuenta de que Jesús también sufrió tal y como lo hacemos nosotros, pero pudo salir airoso de todo ese sufrimiento. Debido a que Jesús es nuestro gran Sumo Sacerdote, Jesús puede ayudarnos siempre que lo necesitemos.

El siguiente pasaje comparte la reacción de alegría que tuvo Pablo al enterarse de que estos cristianos pudieron soportar todas las pruebas por las que habían pasado gracias a su fe (Hebreos 3:6).
Expand
Expand
Expand
¿Qué es el evangelio?
Download the app:
BibleRef.com is a ministry of