¿Qué significa 1 Juan 4:5?
A diferencia del ánimo y el consuelo que Juan les ofreció a los creyentes en el versículo 4, aquí Juan pasa a decir tres cosas negativas sobre los falsos maestros. Primero, los falsos maestros son del mundo, no de Dios. El amor de Dios no reside en las personas que le pertenecen al mundo (1 Juan 2:15–17).En segundo lugar, debido a que son del mundo, su cosmovisión, su manera de ver el mundo, es impura. Una persona del mundo habla desde una perspectiva mundana, lo cual no debería sorprendernos, y esas personas no "permanecen" en Dios ni dicen la verdad.
En tercer lugar, el mundo las acepta porque piensan igual que ellos. En resumen, "el mundo los oye". Es lógico que los incrédulos escuchen y acepten las enseñanzas de los incrédulos. Sin embargo, Juan les enseña a los creyentes esto: "no amen al mundo, ni las cosas que están en el mundo" (1 Juan 2:15). En cambio, los creyentes deben hacer la voluntad de Dios, sabiendo que vivirán por el resto de la eternidad con Él (1 Juan 2:17).