¿Qué significa Filipenses 4:23?
Pablo concluye aquí diciendo algo que dice en muchas de sus otras cartas: "la gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con todos ustedes". En Filemón 1:25, Pablo dice casi lo mismo, y es curioso notar que esa es una de las epístolas que Pablo también escribió desde la cárcel. En 2 Corintios 13:14, Pablo también usa la frase "La gracia del Señor Jesucristo". Romanos 16:20 termina con la siguiente frase: "que la gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con ustedes". Pablo usa esta frase de una manera similar al final de muchas de sus otras cartas (Gálatas 6:18; 1 Tesalonicenses 5:28; 2 Tesalonicenses 3:18).¿Por qué hace Pablo un énfasis en la importancia que tiene la gracia al final de sus cartas? Tal vez Pablo, debido a que fue un hombre que fue entrenado para seguir la ley de la manera más estricta posible, se quedó tan impactado por la gracia de Jesús que no podía dejar de hablar de ello. Dios nos salva por la gracia y vivimos a través de la gracia de Dios día a día. Pablo habla mucho sobre la gracia de Dios, la cual lo hace todo, y sobre el hecho de que nuestros propios logros humanos no sirven de nada cuando se trata de alcanzar la salvación. En cambio, es la gracia lo que nos transforma y nos da fuerza espiritual.
En Filipenses 4:21–23, Pablo concluye su carta a los filipenses. Como en muchos de sus otros escritos, Pablo hace hinca-pié en la importancia que tienen tanto la fraternidad como la gracia de Dios. En varias de sus epístolas, Pablo concluye sus comentarios apelando a la gracia de Dios, por medio de Jesucristo. Debido a que él mismo había sido transformado por su gracia, Pablo tenía buenas razones para recordárselo a los demás siempre que podía.
Pablo les pide específicamente a dos mujeres cristianas, Evodia y Síntique, que resuelvan la disputa personal que tenían entre las dos; anima a los demás cristianos a actuar de una manera razonable y siempre desde el fundamento de Cristo. Pablo señala que su experiencia de vida le había enseñado a contentarse con cualquier bendición material que recibiera, por muy grande o pequeña que fuera. Esta confianza en el poder de Cristo no sólo les permite a los creyentes estar contentos, sino que también trae paz a través de las relaciones que tenemos con otros cristianos. Para ello, también debemos poner nuestra atención en las cosas positivas y tratar de hacerlo continuamente. Pablo les agradece sinceramente a los filipenses todo el apoyo que le habían ofrecido a lo largo de los años.