¿Qué significa Filipenses 4:18?
Este versículo añade detalles adicionales sobre el regalo que Pablo recibió a través de Epafrodito. Es evidente que Pablo recibió algo de dinero, suficiente como para considerar que ya no necesitaba nada más. La frase "todo lo he recibido" nos sugiere que Pablo recibió varias cosas. Además de dinero, Pablo probablemente recibió algunos objetos útiles. Aunque en realidad no sabemos qué fue. Quizás los filipenses le enviaron comida, ropa, suministros o artículos personales destinados a ayudar a Pablo en su trabajo diario. De hecho, quizás también le enviaron herramientas para escribir, tinta y más cosas que fueron muy útiles durante su ministerio.Pablo dice que estos regalos fueron un "sacrificio aceptable, de olor fragante y agradable a Dios". Al igual que las ofrendas propias que se ofrecían durante la época del Antiguo Testamento, las cuales se consideraban sacrificios aceptables que agradaban a Dios, los regalos que los filipenses le enviaron a Pablo provocaron que Pablo se sintiera satisfecho de la misma manera. Los creyentes ya no vivían bajo los requisitos del sistema de sacrificios, sino que podían darle con alegría al Señor a través de otras formas de adoración, tal y como lo hicieron con Pablo, a quien le ofrecieron dinero, tiempo y apoyo espiritual.
Filipenses 4:10–20 nos describe la manera en que los cristianos pueden superar cualquier tipo de preocupación y deseo mundano, independientemente de las circunstancias en las que se encuentren. Al tomar la decisión deliberada de estar con-tento, los creyentes pueden confiar en que Dios los ayudará con sus verdaderas necesidades, en lugar de dejarse consumir por el materialismo o la ansiedad. Pablo había aprendido a estar contento gracias a todas las pruebas y experiencias minis-teriales por las que tuvo que pasar. Pablo también les da las gracias a los filipenses por su generosidad y está confiado en que Dios los bendeciría por ello.
Pablo les pide específicamente a dos mujeres cristianas, Evodia y Síntique, que resuelvan la disputa personal que tenían entre las dos; anima a los demás cristianos a actuar de una manera razonable y siempre desde el fundamento de Cristo. Pablo señala que su experiencia de vida le había enseñado a contentarse con cualquier bendición material que recibiera, por muy grande o pequeña que fuera. Esta confianza en el poder de Cristo no sólo les permite a los creyentes estar contentos, sino que también trae paz a través de las relaciones que tenemos con otros cristianos. Para ello, también debemos poner nuestra atención en las cosas positivas y tratar de hacerlo continuamente. Pablo les agradece sinceramente a los filipenses todo el apoyo que le habían ofrecido a lo largo de los años.