¿Qué significa 2 Corintios 12:3?
Siendo lo más humilde posible, Pablo está describiendo la experiencia que tuvo cuando fue arrebatado al "tercer cielo" hacía ya 14 años desde el momento en el que escribió esta carta. Para evitar que se le diera algún tipo de crédito personal por haber pasado por esa experiencia, comienza diciendo que todo esto le sucedió a un hombre que conocía. Sin embargo, a todos les quedaría claro que Pablo estaba hablando de sí mismo en este pasaje (2 Corintios 12:6–7).Pablo dice que fue "arrebatado" al paraíso, un término que viene del griego harpazo, el cual también usa en 1 Tesalonicenses 4:17 para describir lo que les sucederá a los creyentes que estén vivos cuando Cristo regrese. Esto es lo que algunos llaman el "rapto" de la iglesia.
En el versículo anterior, Pablo dijo que fue a parar al tercer cielo, el paraíso, donde viven Dios y los ángeles. Jesús le dijo al criminal de la cruz que murió junto a Él "de cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso" (Lucas 23:43).
Pablo repite una vez más que no sabe si viajó al paraíso en su cuerpo o a través de algún tipo de visión. Sin embargo, confía en que sucedió y que Dios es el que sabe si estuvo allí en persona o en espíritu.
En 2 Corintios 12:1–10 Pablo nos describe algo asombroso. Fue transportado, en cierto sentido, al tercer cielo o paraíso, donde recibió una revelación de Dios que era inefable. Para que siguiera siendo una persona humilde, Dios le clavó un "aguijón en el cuerpo" y se negó a quitárselo a pesar de las súplicas de Pablo. En cambio, Dios le dijo a Pablo que Su gracia era más que suficiente y que Su poder se perfeccionaba en las debilidades de Pablo. Pablo dice una vez más que se gloriaría en su debilidad y se contentaría con su sufrimiento, porque cuando Pablo era débil se demostraba con claridad el poder y la fuerza de Cristo.
Con la mayor humildad posible, Pablo nos describe una de sus mayores experiencias en el ministerio. Fue llevado hasta el "tercer cielo" y recibió una revelación de Dios que no podía revelar en la Tierra. Pablo se niega a alardear de ello, pero lo menciona para así poder hablar de las consecuencias que vinieron después de haber tenido esa experiencia. Para mantener humilde a Pablo, Dios le clavó un "aguijón en el cuerpo", algún tipo de enfermedad que la Biblia no nos específica cuál es. Pablo tuvo que aprender a contentarse con su sufrimiento ya que el poder de Dios se perfeccionaba en su debilidad. Después de eso, Pablo reprende a los corintios por no haberlo apoyado durante los conflictos que surgieron con los falsos maestros de Corinto. Después, les dice que él nunca se aprovechó de nadie y expresa que estaba preocupado de volver a Corinto y ver que algunas personas seguían viviendo en pecado.
