Verso
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21

2 Corintios 5:5

LBLA Y el que nos preparó para esto mismo es Dios, quien nos dio el Espíritu como garantía.
NBLA Y el que nos preparó para esto mismo es Dios, quien nos dio el Espíritu como garantía.
NVI Es Dios quien nos ha hecho para este fin y nos ha dado su Espíritu como garantía de sus promesas.
RV1960 Mas el que nos hizo para esto mismo es Dios, quien nos ha dado las arras del Espíritu.
JBS Mas el que nos hizo para esto mismo, es Dios; el cual así mismo nos ha dado la prenda del Espíritu.

¿Qué significa 2 Corintios 5:5?

Pablo ha expresado el deseo que tenía de dejar atrás la tienda de su cuerpo, el cual era moribundo y estaba saturado debido al pecado, para así poder ocupar un cuerpo eterno que existirá para siempre. Pablo confiaba en que ese cuerpo pondría fin al "gemido" de la vida que vivimos antes de la muerte y al anhelo de estar con Dios. En verdad, esto es lo que desean todas las personas que creen en Jesucristo. La vida eterna es nuestro destino gracias a Cristo.

Pablo dice aquí que Dios ha estado preparando a los cristianos desde el principio para que finalmente puedan transformarse. De hecho, esa transformación es una de las razones por las que muchos llegan a la fe en Cristo en primer lugar: para experimentar la gloria indolora e inmortal de la eternidad tal y como Él quiso que la experimentáramos desde el principio.

¿Cómo sabemos que esto es verdad? Pablo dice que el Espíritu Santo de Dios que habita dentro de nosotros representa la promesa de Dios que confirma que un día alcanzaremos la eternidad. Dios nos ha dado el Espíritu como garantía. Toda persona que confía en Jesús para la salvación recibe al Espíritu Santo. El Espíritu nos pone un sello de confirmación para el día de la redención (Efesios 4:30). Esta es la segunda vez que Pablo describe en 2 Corintios la manera en que actúa el Espíritu en la vida de los cristianos (2 Corintios 1:22). De hecho, es una de las razones por las que los cristianos pueden estar seguros de que nuestro destino eterno con Dios está asegurado, sin importar cuáles sean las circunstancias de nuestras vidas en este lado de la eternidad.
Expand
Resumen de contexto
2 Corintios 5:1–10 continúa la enseñanza que Pablo estaba compartiendo en el capítulo anterior. La gloria de la eternidad con Cristo es mucho más importante que cualquier sufrimiento que experimentemos en nuestros cuerpos temporales en esta vida. Pablo anhelaba ocupar su cuerpo eterno, el cual se describe como una casa permanente que Dios mismo ha construido. Sabiendo que ese cuerpo se estaba avecinando, Pablo tuvo el coraje de arriesgarse a sufrir aún más para así continuar la misión de predicar el evangelio. Su única meta en esta vida era agradar a Cristo. Él sabía que todo cristiano y cristiana tendrá que enfrentarse al juicio de Cristo, no para decidir su destino eterno, sino para recibir lo que le corresponde por sus obras mientras vivían en sus cuerpos temporales.
Expand
Resumen del capítulo
¿Por qué soportaba Pablo tanto sufrimiento por predicar el evangelio de Cristo? Pablo sigue hablando aquí sobre la eternidad, y compara nuestros cuerpos terrenales con tiendas de campaña. Pablo deseaba vivir en el cuerpo eterno que Dios les ha preparado a las personas que confían en Cristo, un cuerpo en el que nunca más tendrán que sufrir. Teniendo eso en cuenta, Pablo predicaba con valentía que todas las personas en Cristo se convierten en nuevas personas. En Cristo, Dios está reconciliando a las personas consigo mismo sin tener en cuenta sus pecados. Por eso, Pablo les imploraba continuamente a todas las personas para que se reconciliaran con Dios de esta manera a través de la fe en Cristo.
Expand
¿Qué es el evangelio?
Download the app:
BibleRef.com is a ministry of