¿Qué significa 2 Corintios 8:4?
Pablo ha dicho que los creyentes de la región de Macedonia habían dado generosamente para satisfacer las necesidades de los cristianos que estaban sufriendo en Jerusalén. A pesar de su aflicción y pobreza, acabaron dando mucho más de lo que en realidad debieron dar. Ahora, Pablo añade que incluso le rogaron a Pablo y a sus compañeros que les permitieran formar parte de la colecta. En realidad, no querían quedarse fuera de la oportunidad de ayudar a "los santos", lo cual se refiere a los cristianos que habían alcanzado la salvación, no a una clase especial de creyentes.A juzgar por el contexto aquí, quizás Pablo y los que lo ayudaron a recaudar estos fondos no habían pensado en pedirles ayuda a los cristianos de Macedonia. Es posible que incluso pensaran que los creyentes macedonios en realidad también necesitaban fondos debido a su extrema pobreza. Los macedonios tuvieron que rogarle a Pablo para que les diera la oportunidad de ayudar y luego lo sorprendieron con su gran generosidad. Pablo le dio gracias a Dios por darles la voluntad de querer ayudar con el fin de satisfacer las necesidades de los demás.
2 Corintios 8:1–15 comienza con Pablo elogiando a las iglesias de Macedonia. Estos creyentes suplicaron que se les incluyera en una colecta que se estaba reuniendo para ayudar a los cristianos judíos que estaban pasándolo mal en Jerusalén. Pablo anima a los corintios a cumplir con su propio compromiso de hacer lo mismo por su propia voluntad como un acto de gracia. Al hacerlo, también estarían siguiendo el ejemplo del sacrificio que Jesús hizo por ellos primero. Los cristianos deben dar proporcionalmente para así ayudar a suplir las necesidades de otros creyentes para que todos acaben teniendo lo suficiente como para subsistir.
Los corintios habían acordado previamente que querían contribuir en una colecta que tenía el objetivo de ayudar a los cristianos que estaban sufriendo en Jerusalén. Pablo habla sobre esto con ellos señalando el ejemplo de las iglesias macedonias que, aunque eran muy pobres, acabaron dando más allá de sus posibilidades por su propia voluntad y sin que nadie los forzara a hacerlo. Pablo anima a los corintios a cumplir con su compromiso por su propia voluntad. Tito y dos representantes de otras iglesias iban a ir a Corinto para supervisar la colecta con el fin de que todo se hiciera con integridad. Pablo anima a los corintios a que demuestren su amor y participen en la colecta para los cristianos judíos de Jerusalén.